martes, 27 de octubre de 2009

Diálogos imaginarios: Del dictador y de mi.


-Estas creciendo, sabias?

-Creo que si.

-Y sabes que? No me gusta tu manera de crecer.
Por un momento te llegue a ver como alguien a quien no podría dejar, pero ahora, te veo como a alguien a quien debo cuidar; desafortunadamente no lo puedo hacer.
No puedo cuidarte a cada instante, en la manera en la que tomas tus decisiones, es tu vida, no la mia y tu y yo no somos nada mas que una simple compañía.
Una simple rutina. Día a día, siguiendo los estándares de lo correcto, pero nada mas.
A veces hasta creo que te aprovechas, por que sabes que no puedo decir no, por que sabes que dentro de mi mismo deber (casi inexistente) esta tu bienestar.

-Pero..?
-Pero es que ya no te soporto..

Has llegado al punto en el que quisiera dejarte, callarte, y no hablarte, no verte, no tocarte, ni siquiera de llegar a cruzar miradas.
De que me desespera tu felicidad, tu optimismo, tu energía, y la manera en que eres líder.
Estoy cansada de ver mas de lo mismo;
de ti.

Hasta llego a pensar que si en algún momento me sentí atraída hacia a ti fue por la manera en que nos hacíamos daño. No mutuamente, pero cada uno por su parte, por que tu te seguías destruyendo mientras yo me destruía a mi.
Por que entre nuestra destrucción, (entre tanta mierda ) encontrábamos algo en ti y en mi, algo que nos hacia escapar de la realidad, y hasta hoy, pudiste escapar, y sin embargo, yo no escape.

-Entonces, que es lo que te molesta?

-El que tu ya no estes y yo si. El que tu si puedas y yo no. El que tu supiste cuando escapar y yo no. Todo me molesta de ti, por que tu si puedes y yo sigo aquí.