Letra 13

Entro a verte.

Entro a verte y me encuentro con que eres el mismo de hace 4 veranos.
4 veranos? Se dice fácil; parecen mas.

Hace unos días fui al banco, y en la espera no te vi como nada mas que tu.
Mas tarde, mientras nos ofrecían endeudarnos con artículos innecesarios te recordé tal y eras, como aquella vez.

Como ese verano..

Era la misma luz, y casi los mismos lugares.
Te acuerdas de esa primera cita? Casi la olvido.
Mucha nieve y Coldplay.

Nieve, por que el decir "helado" en esta ciudad se escucha mal.

De repente veo fotos y te veo a ti. Sera tu nuevo corte de pelo?
Sera tu piel? Tus ojos, la falta de actividad laboral o solo tu tono bajo el sol?

Y ahora, cuatro veranos después no hemos cambiado.
Seguís siendo el mismo de siempre, quizá con muchas mas responsabilidades y menos oportunidad de divertirnos.

...Después de todo no eres el mismo.
Y yo, yo que te puedo decir.

Me he convertido en alguien incontrolable.
Que me sucedió? Sucedió que me importa poco ya lo que pase.

Y pronto, un anio mas.
Cinco mas, y la historia vuelve a empezar.
A recordar el ciclo que juro pude cerrar, y que a veces intento abrir.

Pero ahora, soy yo la que estará lejos de aquí.

No puedo escribir ya.

Llevo días tratando de escribir y no puedo.
Por lo general las cosas vienen solas y de la misma manera se van.

Alguien a quien creía era algo parecido a un sabio un día lo dijo, y todo viene solo, y solo se va.

La misma sabiduría que me enseño la aplique hace un par de días.
-"Ya deja de preocuparte".
-Si fuera tan fácil aplicarlo que decirlo.

Precisamente es la misma quien de una manera, bastante complicada y no tanto extrana, me ligo a ti.
Y es precisamente hoy que me empiezo a preocupar por no estar cerca y no tener el control que siempre busco sobre ti.
Sonara enfermo, pero es la única manera en la que lo puedo explicar.

La respuesta nunca ha sido huir, y realmente no estoy huyendo, simplemente me alejo.

Alejarme de ti y de el quiza complique las cosas.
Pero tengo la certeza de que me ayudara a extrañarte, a acostumbrarme a no tenerte y por lo tanto, olvidarte.